29/9/11

Amor eterno

"Soy lo que ves acá, quiérelo o déjalo", le dijo Liliana a Roberto, allá en los cuarenta, entre alguna que otra mirada tímida. Se casaron al año entre sonrisas, y el pacto se dió por anulado mucho tiempo después, con el último suspiro cansado de ella.
 A los dos meses, Roberto murió de tristeza.
 Juraría que él hubiese regalado el libro más gastado de su inmensa biblioteca por estar una vez más al lado de Lili, su compañera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario